miércoles, 3 de diciembre de 2025

Las montañas interiores



LOS DOMINGOS ETERNOS



Todas las erecciones del mundo
anuncian la llegada del amor verdadero




[324]

Milagros son los caminos que convoca el camino en la niebla.

[322]
Pequeña, iban tras de ti. Minutos antes te veían como a un ser extraordinario. Algo que sus mentes no habrían podido concebir. Abrí sus ojos solo para asegurarme que el sol golpeara sus miserias. También me he visto atrapado en algún sueño, junto a una bestia magnífica, arrancándome una a una las máscaras, aliviado.
Pero el miedo te detuvo.
¿Sabes? He visto hombres buscar entre la hierba, he visto hombres desnudos deshilachados por la fatiga, besando la nada dichosos.
¿Podrías encender la luz cuando termines de armarte, grito a grito?
¿Podrías no olvidar incendiar la cocina ?
¿Para que por mañana podamos ser arrastrados por el viento?

miércoles, 26 de noviembre de 2025

Los deseos no esperados


La voluntad del templo 
es reducirte a cenizas hasta el punto de olvidarte, 
escucha a quien te aguarda entre tormentas, escúchalo.







NEED [Este adormecimiento de luz] 7.5° en la escala de Richter / Las dos únicas especies prosperan & mi carne padece tu milagro "O al menos de todas las mentiras esta es la que persiste" HELP ME [Las coordenadas de mi paso no corresponden a las de mi mente] INPUT [Sistemas degenerativos.04] 

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politica&luminicencias 
ELCIELODELOSQUEBEBENMISOJOS
BAJOLATIERRA

martes, 25 de noviembre de 2025

La osadía del Uranio 1932 - Reactor #45

[Bombardeo sobre la ciudad invisible] 
 1543


[654]
09. Y esa fila de hormigas era infinita en ese entonces. 77. Miles igual a una. 12. Nada alteraría el orden de ese movimiento, ni una lupa aproximando el sol a sus cuerpos. 00. Luego de comer helado en el almuerzo familiar, nos abrazábamos fuerte hasta que nuestras cabezas caían. **Un pensamiento único atorado en una avenida donde decías que la amabas entre el humo, robos y desesperación** 99. La camisa manchada por el peso del nombre que en las noches temes pronunciar. [De esta casa no salgo más para luego entrar por la ventana e incendiar el mundo] 11.Qué debí representar para ese orden que continua en mi memoria, esa columna de pensamientos entrando a un hormiguero incansablemente, para que de vez en cuando un insecto seccionado entrara en él para perderse por siempre.



[987]
Volver a casa. A esa casa que ahora son cenizas. Ya lo habías mencionado. Atrás de lo que fue un reino para nosotros ha crecido un bosque. Sin casa alguna no sabemos quien fue el que terminó por huir. Solo dimos los pasos suficientes. Sabemos que una casa puede convertirse en un desastre. Una prisión adorable. Con el tiempo se extraña la presión en las muñecas y en los tobillos. Hubiera preferido quedarme con el recuerdo excitante del fuego y no con las cenizas. Uno entiende que no puede levantar una casa con cenizas. Uno nunca entiende que es una casa. Uno espera conocer la levedad de las cenizas. Uno busca con el tiempo otros reinos.


miércoles, 19 de noviembre de 2025

Fundación de la cosmogonía personal




CEMPAZÚCHIL


A Brenda Vela


Atraído por el aroma del sol macerado en la boca de las flores
No pude recordar la dirección del puerto tras el jadeo constante del nopal
Entonces volví sobre la búsqueda encarnado en el caracol y su doble prisión
Tuve un rostro en la historia de las revoluciones invisibles
Un vínculo sagrado con la estrella amada de los asesinos
Aprendí el rito callado del primer hombre que busca un lugar para morir
Abedul primordial esperando el regreso de las mariposas
Esta playa en su memoria me devuelve hacia su paranoia interminable
Mineral primordial regido por la turbulencia celeste
Cuando el sol era un dios
Y mi voz un elemento precioso e inestable
Devine en agua, renovado por el ascenso del salmón y su reino generoso de muerte
En cada dimensión propuesta por sus matemáticas prevaleció el fuego
Domesticadas las sombras y la presencia del lobo en la escena cotidiana del pan
Las oraciones se hicieron el sordo aleteo de la libélula en el día renovado
Antecedidos por el estallido de la semilla que retorna al sueño 
La calma se hace posible en la tempestad de la carne.

El guardián de la ternura


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Akm-918 Habló esta mañana andrajosa y multiplico las heridas, los satélites en el corazón de la divinidad metálica * chicapunk bajo el puente de los deseos entre linajes de hombres eléctricos * colores invertebrados en este atasco nuclear * desentierro sus voces * en la prédica insolente de los vagabundos * esa estrella está muerta * el cielo * cementerio de luciérnagas.
Saldremos y no dejaremos de girar * pequeña.

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domingo, 16 de noviembre de 2025

El camino del tonto 1435, Rostov.



CERCA DEL CAMPO DE CONCENTRACIÓN DE LOS NIÑOS ELÉCTRICOS



Uno pierde amores, pierde dinero, pierde el bar que adora, pierde camisas, pierde a cada momento. Me preguntan por qué tan iracundo, por qué las llamas, por qué el fuego. Recuerdo a mi abuelo, recuerdo una frecuencia modulada, recuerdo el negro absoluto en la ausencia de torres de alta tensión. Recuerdo que no debo perder mi palabra. No entienden, me dicen: si fueras de otra forma serías un éxito, serías coherente, serías lo que deseas ser. Pero insisto en mi palabra, en mi recuerdo, en mis abuelos. Insisto en mí, a cada momento, a cada instante. Ellos no lo entienden, no pueden descifrarlo. No los juzgo, pero ellos sí lo hacen. Aun así, los entiendo.


Alguna vez le dije a una bella mujer algo sobre la vida: hay dos tipos de personas, las que se sientan a ver un meteorito entrar en la atmósfera, furiosamente, un manjar para los ojos, electricidad pura en el cerebro. Uno puede amar y creer que todo es eterno. Dos tipos de personas: los que acuden a ver ese espectáculo o los que deciden ser el meteorito que erosiona su vida con furia, violentamente, dolor hermoso, contra el planeta.


jueves, 13 de noviembre de 2025

La gran noche cósmica



[243]
Así son nuestras canciones de amor, así nuestro paso descoordinado; gritamos toda la noche, hicimos la noche en realidad mientras todos huían. Las avenidas de Lima ardían en la garganta de los grandes hombres que pronto desaparecerán, invisibles en cada palabra de las niñas hermosas. Uno se pierde con facilidad entre las luces de los edificios, uno anda perdido siempre entre los ojos de una mujer desconocida que sonríe desde su propio derrumbe, faro solitario en la madrugada del mundo. Uno aprende a reconocer un abismo a grandes distancias, aprende a saltar desconociéndolo todo, a caer con la calma de quien por fin recuerda su origen, y el ruido del cuerpo cayendo parece una plegaria mal pronunciada.

[I65]
Poder sobre todo acto mágico, inalterable ante los ojos humanos, se enciende el aliento de hojas secas y polvo. Esta región tuvo un lenguaje parecido al de la piedra, y los frutos se abrían para devolver aves a las corrientes invisibles del nuevo día —cierto para algunos, inalcanzable para todos—. Entonces era un ruido delgado, una distorsión de colores, un espesor de calma cuando todos, vencidos, anhelaban un resplandor, un incendio más allá del instante del que son soberanos. Mi patria de sombras chinas me hablaba del fuego y sus guardianes, de las cenizas que huían al iniciarse las danzas; todo era inédito para mí: la voz que traía un dulzor inexplicable, el último alimento antes de que caiga la ceniza encendida, el sol llegando ciego y severo, el último hombre balanceando el universo en su pecho, como si aún fuera posible contener la claridad.



[829]
Si al menos fueran frecuentados por alguna luz, nada tendría que nombrarse. Inútiles las formas en que nos entregamos a la deriva, inútiles los cuerpos que se hunden en los océanos sin remedio. Ahora este imperio de niebla y figurillas de humo se disuelve. Lejos de aquí era posible esa calma, pero otro mar es el que sueña, otras las aguas en las que se ahoga, otro el fuego que nos pronuncia cuando ya no queda boca, ni cuerpo, ni distancia.